BigHouse, 5 de julio 2023
Muchos factores pueden desencadenar una depresión en alguno de los dos padres, o bien en los dos. Hoy en día hay mucha y mejor información sobre la depresión y te queremos invitar a leer este artículo donde hablaremos sobre cómo puede afectar en las emociones y conductas en los niños cuando hay uno o los dos padres con esta enfermedad.
Primero que todo, tenemos que saber que hoy es posible contar con especialistas y tratamientos que nos pueden ayudar a pasar este momento y que es fundamental pedir ayuda cuando lo necesiten.
Los niños son perceptivos, desde muy chiquitos pueden percibir lo que pasa a su alrededor y lo manifiestan, según su edad, con algunos cambios en sus emociones y conductas. En este artículo te daremos algunas luces de algunas formas que pueden ser manifestadas y además de algunos tips para afrontar mejor ese momento.
Malestar emocional: Los niños de padres deprimidos pueden experimentar un mayor malestar emocional. Pueden sentirse tristes, preocupados, ansiosos o confundidos, sin entender por qué sus padres están pasando por un momento difícil.
Culpa y autoculpabilidad: Los niños a menudo internalizan los problemas de sus padres y pueden sentirse culpables por la depresión de estos. Pueden creer erróneamente que son la causa de los problemas o que no son lo suficientemente buenos para hacer felices a sus padres.
Baja autoestima: La depresión parental puede afectar la autoestima de los niños. Pueden desarrollar una imagen negativa de sí mismos y dudar de su importancia debido a la falta de atención emocional y la falta de capacidad de los padres para brindarles el apoyo emocional necesario.
Dificultades en las relaciones interpersonales: Los niños con padres deprimidos pueden tener dificultades para establecer y mantener relaciones saludables con sus compañeros y otras personas. Pueden tener dificultades para confiar en los demás o para expresar y gestionar sus propias emociones de manera adecuada.
Ansiedad y miedo: La inestabilidad emocional y la falta de previsibilidad que a menudo acompañan a la depresión parental pueden generar ansiedad y miedo en los niños. Pueden preocuparse constantemente por el bienestar de sus padres y temen perderlos o enfrentar situaciones difíciles.
Depresión y otros problemas de salud mental: Los niños con padres deprimidos tienen un mayor riesgo de desarrollar ellos mismos problemas de salud mental, como depresión, ansiedad u otros trastornos emocionales. La presencia constante de un ambiente deprimido puede contribuir a la vulnerabilidad emocional de los niños.
Es muy importante saber que cada niño y situación es distinta, puede que tenga alguna de estas señales como puede ser que no y estén afectados igualmente. Es fundamental que los niños, por muy pequeños que sean, puedan entender lo que está ocurriendo en la familia y los cambios concretos que pueden ocurrir en las dinámicas y momentos familiares.
Es difícil sostener las emociones de un niño cuando uno como padre está pasando por un momento donde debe ser sostenido, es por eso que también te dejamos algunos tipos de como afrontar ese momento y poder salir adelante en el tiempo que necesites.
Busca apoyo profesional: La depresión es una enfermedad seria y tratable. Buscar ayuda de un profesional de la salud mental es fundamental. Un terapéuta o psicólogo puede brindarte apoyo, ayudarte a comprender tus emociones y proporcionar estrategias y herramientas para manejar la depresión de manera saludable.
Conversa claramenta con tus hijos: Hablar con tus hijos sobre la depresión de manera adecuada a su edad puede ayudarles a comprender lo que estás pasando. Explica que esto no es su culpa y que estás buscando ayuda para sentirte mejor. Anímalos a hacer preguntas y sacar sus propias emociones.
Mantén una rutina estable: La estructura y la rutina pueden proporcionar a tus hijos un sentido de seguridad y estabilidad en un entorno en el que puede haber altibajos emocionales. Intenta mantener una rutina diaria predecible con hororios regulares para las comidad, el sueño y las actividades.
No te culpabilices: La depresión no es culpa tuya. Reconoce que estás pasando por un desafío, pero no te castigues ni te sientas culpable por no poder estar al máximo todo el tiempo. Recuerda que buscar ayuda y cuidar de ti mismo también es importante para el bienestar de tus hijos.
usca apoyo en tu red de apoyo: No tengas miedo de pedir ayuda a familiares, amigos cercanos u otros papas en situaciones similares. Compartir tus sentimientos y preocupaciones con personas de confianza puede aliviarla carga emocional y darte el apoyo que necesitas.
Cuida de ti mismo: No descuides tu propio bienestar. Duerme lo suficiente, mantén una alimentación saludable, haz ejercicio regularmente y encuentra tiempo para actividades que disfrutes.
La depresión parental está siendo más común de lo que queremos, es por eso que en nuestro jardín siempre estaremos apoyando en cualquier proceso que vivan las familias que nos integran. Sabemos que es un periodo, esto va a pasar y que lo mejor que puede hacer un papá o mamá con depresión es apoyarse en las personas de su alrededor para así poder pasar este duro momento acompañado y tranquilo.
El trabajo de las emociones es reforzada en todos los niveles de nuestro jardín, para que cuando la sientan puedan reconocerla y saber qué hacer frente a ella.
